Hay una parte de mi de la que quería escribir, así la deslumbro un poco más, ya que esta algo difusa.
Hoy sentí que a veces creo que estoy sola contra el mundo.
Yo se que muchas veces uno se siente mártir de su propia vida, que todos creen en alguna parte de su ser, que se sacrifican por alguien, que hacen algo por alguna persona o grupo, y no tienen la recompensa que deberían.
Que hace las cosas al pedo, por buen samaritano nomás.
Si bien a veces es mi caso, no me refiero a eso exactamente. Sino que siento que solo yo puedo lidiar con algo así.
Hasta hace un año yo era capaz de soportar cualquier característica de una persona; aceptarla, respetarla y que esto no me molestase.
Soy una chica muy… em pacifista, aunque no sé exactamente si entro en ese término.
Y podía llegar a tener amigos nazis, fachas, superficiales, materialistas, etc y quererlos y, sobre todo, no juzgarlos.
No me molestaba que tuviesen pensamientos MUUUUY diferentes que los míos, y tal vez ellos ni me lo respetaban, tal vez ni me consideraban su amiga, pero yo sí.
Esa faceta mía duro varios años, pero a la larga me di cuenta que si quiero respetar lo que pienso y opino, estar con gente así no me sirve juntarme.
Me es raro escribir “no juntarme”, sueno como a mi vieja o mi abuela hablándome de los nenes malos de la cuadra de enfrente.
Igual creo que en parte ese lado mío no se fue del todo; porque a la larga es parte de mi esencia. Yo soy así. Yo soy de ayudar sin mirar a quien. Pero al menos ahora no me confío. No espero que me ayuden. Cosa que antes si esperaba.
¿A qué viene todo esto? Es que me siento sola contra el mundo, mejor dicho, sociedad, porque me cuesta juzgar a las personas.
Me cuesta decir “está loca”, “es un borracho”, “un vago mas” y demases títulos que se le pone a la gente que nos rodea por la calle, que hace la fila del super, que viaja con nosotros en el bondi.
Me cuesta generalizar con la gente, siempre tengo la misma pregunta “¿Por qué?”
“¿Por qué esa señora cruzo tan mal la avenida y casi hace que la arrolle el colectivo, o que este se vuelque?”
“¿Por qué ese señor es tan gruñon y habla tan mal a la gente aun cuando esta le trata bien?”
“¿Por qué esa señora habla muy bajito y a nadie?”
Me pregunto el porqué de sus acciones, y el porqué de esos porqué.
Odio los títulos que se usan para generalizar, y me odio a mi misma cuando solo PIENSO en alguna persona y la generalizo.
“Esa rubia mira como se pinta/viste, debe ser una putita…”
Esos pensamientos que son completamente normales, completamente perdonados, porque son PENSAMIENTOS, y uno tiene derecho a pensar lo que quiere; yo no los soporto en mi.
Siempre pienso en el extraño, en el que atiende el local, en el que me atiende el teléfono, en el que viaja a mi lado.
Y no soy ninguna samaritana, ni es todo el tiempo el que me planteo eso. Solo yo le doy importancia realmente. Solo yo y mi manía de ser “pura de mente” (JAJAJAJAJA que estúpida, religiosa o de casta es el termino xDDD) me controla el cerebro.
Obviamente insulte mentalmente, llame loco a gente que se comportaba extrañamente y sin saber los porqués, e hice todas esas cosas. Pero siempre evito hacerlas, y me es reconfortante darme cuenta como evite juzgar y generalizar a algún extraño. Se siente lindo y me hace sentir mejor persona.
Pero es una mierda porque los demás aun así te cagan y a la sociedad no le importa.
Porque es simplemente lo que pienso.
¿El “¿Por qué?” de mi comportamiento?. Ni idea.
No se porque me manejo así, tal vez la crianza amorosa de mis padres, las pocas traiciones que tuve, que se yo.
Nunca pensé en esa faceta mía, ni hable de ella en voz alta, y es la primera vez que lo escribo. Temo que me tomen de arrogante o presumida o bien mentirosa “yo soy buena y ustedes malos e impuros”
Da igual, yo se que la gente en general no piensa como yo.
(PD: A todos ellos que me entienden y se sienten como lo siento, un beso y abrazo, hay que mantenernos fuertes :3)